Eugenio de Mora rozó cortar una oreja en Las Ventas


Eugenio de Mora es un profesional de los pies a la cabeza. Enorme faena en el primero de su lote al que estuvo apunto de cortarle una oreja pero pinchó a la hora de entrar a matar, gran ovación se llevó por parte de las personas presentes en Las Ventas. Con el segundo de su lote lo tuvo algo más complicado, un toro que no que no se dejo llevar al compás de la muleta y que Eugenio tuvo que solventar rápidamente con los aceros, siendo silenciado tras matar al segundo toro de su lote.

Juan del Álamo mejor con el segundo de su lote que con el primero. En el primero le costó algo más por el aire que hacía sobre el 'albero' y en el segundo pudo demostrar algo más su toreo, donde recibió un buen susto por parte del toro de Fuente Ymbro, cuando intentó torear al natural. Voltereta muy violenta que le provocó varias subidas de arriba a abajo, quedándose todo en un susto.

El torero valenciano Román logró cortar una oreja en Las Ventas, como hizo anteriormente. Una oreja que cortó al primer toro de su lote donde toreó con mucho atrevimiento hecho que le provocó llevarse algún susto sin llegar a mayores por su buen 'hacer' con la muleta. Román cuajó una gran faena por su lado zurdo de una forma honesta y con mucha entrega, lo que le llevó a cortar una oreja, que fue protestada por parte del público.
En el segundo de su lote, Román quiso realizar nuevamente una faena similar a la que hizo en el primero, para intentar abrir la puerta grande pero sin fortuna alguna. El animal con unos pitones bastante altos, cosa que no le facilitó nada el toreo al torero valenciano. Su atrevimiento con el segundo le llevó a que el toro le propinara dos fuertes volteretas, sin consecuencias algunas, se libró en ambas ocasiones de algo a mayores.

La corrida de Fuente Ymbro en líneas generales fue bastante desigual y muy floja, aunque bien presentada. La mayoría de los toros perdieron mucha fuerza después del tercio de varas y esto provocó que no pudiéramos ver en condiciones buenas a la hora de la faena.

Eugenio de Mora: ovación tras aviso y silencio

Juan del Álamo: silencio tras aviso y silencio

Román: oreja y ovación tras aviso

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