Álvaro Lorenzo, cornada y oreja en Las Ventas
Foto: Alejandro Lara
La oreja llegó en el sexto y último toro de la tarde, que cerraba la primera corrida de toros de abono, en una faena basada al natural y la exposición en todo momento por parte del toledano.
No es oro todo lo que reluce, o no es como empieza sino como acaba. Tras una lidia desastrosa y digna de capea por parte de la cuadrilla de Álvaro Lorenzo y ante el gran desconcierto creado en los tendidos, Lorenzo supo asentar cátedra y convencer al público presente para hacerles cambiar de opinión.
Lorenzo lanceó al de Montalvo con mucho gusto con la capa por ambos pitones y dejando una gran media rematando la tanda. En la faena se basó en todo momento al natural. Midiendo y acortando las distancias. Sobreponiéndose y exponiéndose ante el de Montalvo que tenia buena condición en la embestida, pero que por momentos salía suelto en la muleta del toledano. Aguantando miradas y parones por parte del astado de Montalvo. Hasta el punto de darle una tremenda voltereta por todos los aires y regresando rápidamente a la cara del toro.
Lorenzo sabía que había metido al público de lleno en la faena y que está podía acabar tocando pelo. Dejó grandes naturales ajustados de riñones y se la jugó al entrar a matar para rubricar de esa manera su actuación.
La petición de oreja fue fuerte por parte del presente, muy fuerte. Aunque quizás no ten fuerte como la de Daniel Luque en su cuarto toro. En esta ocasión, Lorenzo fue el que paseó la vuelta al ruedo con la oreja en la mano y Daniel Luque dio una vuelta al ruedo de gran peso.
Finalmente y tras la muerte del animal, Lorenzo tuvo que pasar a la enfermería y fue operado de una cornada de aproximadamente 15 cm en su muslo derecho.
En el primero de su lote, Álvaro, se vio por el presente. Hasta el momento y en lineas generales la corrida salió de toriles algo desfondada, escasos de fuerza y desrazada.
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