Jairo Miguel pierde un lote de puerta grande, Sánchez y De Manuel tocan pelo en San Martín de Valdeiglesias
Interesante corrida de toros la que se ha lidiado en la tarde de hoy, en la localidad madrileña de San Martin de Valdeiglesias. Toros de la ganadería madrileña de Monte la Ermita se enfrentaron en duelo ganadero ante toros de la ganadería de Rehuelga. Jairo Miguel, Ángel Sánchez y Francisco de Manuel hacían la terna.
Jairo Miguel dejó una tarde más que interesante y se quedó sin puerta grande por los repetidos fallos que tuvo con los aceros. El extremeño lidió el mejor lote de la tarde con dos toros muy completos; bravo, astifino y con gran tranco en la muleta el de Monte la Ermita y el mejor toro de la tarde -el de Rehuelga- en tipo Santa Coloma que lo toreó de salón prácticamente.
Abrió plaza Jairo Miguel ante un serio y astifino animal de Monte la Ermita pero noble a la vez, donde lo mejor en la muleta llegó por el pitón derecho. El extremeño dejó largos muletazos e importantes "derechazos" con profundidad y hondura. Una faena que fue de menos a más pero donde al público le costó entrar en la faena. Se atascó con los aceros donde perdió todas las opciones de tocar pelo y dió una vuelta al ruedo tras aviso.
El cuarto de la tarde -segundo de su lote- fue una pintura de animal. Bajo, corto, entipado de hechuras y con una embestida dulce y profunda. Le costó encontrarle los terrenos al extremeño y cómo plantearle faena. El de Rehuelga lo pedía todo por abajo y muy despacito. Lo mejor llego al natural donde el extremeño "esbozó" grandes naturales y de frente. Pero nuevamente apareció el enemigo de Jairo Miguel durante toda su tarde. La espada. Esa maldita espada que nuevamente le volvería a privar de tocar pelo. Y quien sabe si estaríamos hablando de una posible puerta grande… quién sabe si estaríamos hablando de una oreja… o incluso de las dos, si la espada hubiese entrado… Jairo dejó un toreo caro y para paladares exquisitos al cuarto de la tarde; pero como se suele decir: "sin espada, no hay paraíso".
Ángel Sánchez cortó una oreja al segundo de la tarde. "Sonrisita" de Monte la Ermita, un serio colorado y bravo en la muleta. Ángel Sánchez le asestó una gran tanda al natural llevándolo largo de un lado a otro. Redondos y derechazos completaron una seria y formidable actuación, rubricada con una estocada en todo lo alto. Oreja de ley.
El segundo de su lote -hacia de quinto de la tarde, turno de Rehuelga- muy en Buendia este toro al que Ángel le asestó unas buenas verónicas con la capa. En varas ofreció un gran tercio donde metió la cara y empujó con codicia sacando al caballo a los medios. Trago y mucho al de Rehuelga al que no llegó a meterle nunca en la muleta donde rebañaba y estuvo apunto de ponerle en serios a puros. Estocada contraria y silenciado en su actuación.
Francisco de Manuel ofreció una tarde muy seria antes de afrontar su compromiso en la Plaza de Toros de Las Ventas. Y si mencionamos la palabra compromiso, debemos de decir, que De Manuel le tuvo en toda la tarde. A pesar de que lidio el peor lote de la corrida. El de Monte de la Ermita se le rajó prácticamente de salida y cantó la gallina marchándose hacia tablas. De Manuel hizo esfuerzos en vano, pero siempre con esa palabra. Compromiso.
El sexto y último de la tarde que cerraba plaza, era un señor. Y más que señor, era un tío. Serio y astifino como el solo. De Manuel estuvo muy serio y comprometido con el, tragando mucho en varias tandas. Poniéndose en el sitio y poniéndose de verdad. Sacando naturales muy meritorios que el público supo reconocer. De este modo y con un espadazo en buen lugar, lograba cortar una oreja a "Perlasnegras" a base de tesón, oficio, entrega y compromiso.
Ahora todo queda en el aire… Jairo Miguel… Ángel Sánchez… Francisco de Manuel… quedará todo en mano de los jurados… Y es que el pase a la siguiente fase, está caro. Muy caro. ¿Quién será finalmente…?
Plaza de Toros de San Martín de Valdeiglesias. Se lidiaron toros de Monte la Ermita y Rehuelga a modo de desafío ganadero con motivo de la Copa Chenel.
Jairo Miguel: vuelta al ruedo y ovación
Ángel Sánchez: oreja y silencio
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