Tarde para los valientes en Villaseca de la Sagra
Tarde dura y para los valientes en la quinta novillada de abono del Alfarero de Oro 2021 en la localidad toledana de Villaseca de la Sagra. Salió dura la novillada de Monteviejo y por momentos se vivieron muchos momentos de peligro entre los actuantes. La mayoría de ellos, sin consecuencias algunas por fortuna. Una terna dispuesta y valiente formada por Jesús Diez "El Chorlo, Carlos Olsina y Francisco Montero. Se lidiaron cinco novillos de Monteviejo (3º y 4º de la tarde se dejaron) y un sobrero de la ganadería de Baltasar Ibán tras ser devuelvo el sexto y último de la tarde de Monteviejo.
Jesús Diez "El Chorlo" abrió la tarde de "no hay billetes" en la plaza de toros de La Sagra ante una "alimaña" de Monteviejo. A pesar de que el animal metía muy bien la cara en el capote de El Chorlo, el miedo y las dudas fueron creándose en el ruedo y pasaron a mayores. La tensión se comenzó a vivir en los tendidos donde el de Monteviejo desarrolló aún más su sentido y se hizo el dueño de la plaza. Cogió de malas maneras al subalterno Corruco de Algeciras afortunadamente sin consecuencias. Chorlo tiro de valentía y de disposición haciendo todo lo posible.
El cuarto de la tarde -segundo de su lote- fué el más destacado de la tarde. En banderillas puso en complicaciones a Corruco de Algeciras que se expuso en el tercio de banderillas y tuvo que pasar a la enfermería. Tuvo buen fondo en la muleta y Chorlo le entendió a la perfección. Logro pases más que meritorios por el pitón derecho del animal. Mató a la primera con una estocada que era efectiva pero tardó en caer. Recogiendo la única vuelta al ruedo de la tarde.
Olsina no tuvo opciones ninguna con el segundo de la tarde. No tardo mucho en pasaportarte y marchar hacia los trastos de matar, para despachar al novillo. Horrible con los aceros quien mató mal con la espada y horrible con el descabello donde entró hasta en cuatro ocasiones.
Con el quinto de la tarde pasó un buen trago. Otro animal vacío que no tenía nada dentro, pero Olsina quiso mostrar disposición y dignidad en la cara del novillo. Le costó pasaportarle, pero con dignidad.
Montero se expuso y expuso en los tendidos de Villaseca de la Sagra con el tercero de la tarde. Sonó la música en una tarde más de lío de José Otero en el tercio de banderillas. ¡Armó la monumental en banderillas! Dejó tandas de muchísimo mérito. Fue prendido por el animal y fue atendido en el callejón.
Al sexto y último de Monteviejo que cerraba plaza le formó un lío con la capa. Montero volvió a tirar de sus que haceres y se marchó a la puerta de toriles para recibir con el capote de paseo a su animal. Seguido de un gran recibo con la capa y poniendo en pie los tendidos de Villaseca de la Sagra. El de Monteviejo no tenía fuerzas ningunas y comenzó a caerse constantemente al suelo, teniendo que ser devuelto. Gesto que a Montero no le terminó de convencer, supongamos que después del lío que le monto con el capote. Salió en su lugar un buen novillo de Baltasar Ibán que se comió la muleta de principio a fin. Montero no quiso ser menos y anteriormente con el capote, en esta ocasión, se marchó de nuevo a portagayola. Montero sacó algunas tandas sueltas pero nunca llegó a conectar bien con el animal. Nunca tuvo acople la faena.
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