Jorge Martínez y Raúl Puebla destacan en el último del Alfarero de Plata en Villaseca de la Sagra
En la terna compuesta de hoy, los nombres destacados fueron los de Jorge Martínez y el toledano Raúl Puebla. También cabe destacar la mejoría de la toledana Estrella Magán, quién estuvo hoy muy firme ante su animal.
Abrió la tarde de hoy Marcos del Ricón, que pasó sin penas y sin glorias por el coso de Villaseca de la Sagra. No conectó con el público en ningún momento y estuvo bastante soso con la muleta en la cara del animal. En público jamás se metió en su faena.
La segunda vaca correspondió a Álvaro Burdiel. Una vaca muy bonita de presencia, pero totalmente diferente a la anterior. Esta mucho más cuajada y con mucha más seriedad, un tranco muy diferente.
Sin lugar a dudas una gran vaca donde se la dieron tandas y tandas en la muleta y en ningún momento mostró síntomas de cansancio.
La pena es que de todas las tandas y todos los pases que se la dieron con la muleta, poco estuvieron a la altura de semejante animal. Burdiel estuvo muy por debajo de la becerra y mostró carencias.
La vaca pedía echarle la muleta de largo, como bien lo indicaba el hijo del ganadero posteriormente, y no se supo ver por parte del novillero,
La tercera vaca de la tarde correspondió a la toledana Estrella Magán. Sin lugar a dudas, la toledana demostró en la tarde de hoy, una gran mejoría en su torero. Mucho más firme y con las ideas asentadas.
Lidió una vaca muy pegajosa en la muleta, donde estuvo firme con ella. Quizás le faltó un punto de saber darla tiempo entre tanda y tanda para evitar los enganchones finales en la muleta y algún que otro susto con la becerra.
La cuarta vaca de la tarde correspondió a Jorge Martínez quien no tuvo nada de suerte ante un animal nulo en la muleta y donde el novillero no puedo hacer nada ante el animal. Sin opción alguna.
Debido a lo ocurrido con el animal, el ganadero decidió donar la becerra sobrante para Jorge y para Eugenio de Mora, quien apenas dió dos tandas al animal y le dejó la becerra al novillero.
Fué el día y la noche entre ambas becerras. Con esta sí que Martinez pudo mostrar su concepto y su toreo. Cuajó una gran faena con mucha torería y mucho gusto y temple en la muleta, ante una gran becerra.
La quinta y última becerra correspondiente a los novilleros fué para Raúl Puebla. El toledano también dejó buenas sensaciones en el tentadero ante un animal que tenía brusquedad en la muleta, pero el toledano supo darla buen trato. Trazó tres buenas tandas de muletazos y dejó pases de pecho poderosos ante el animal.
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