Resumen del Alfarero de Oro 2017 en Villaseca de la Sagra
Se cerró una nueva edición del Alfarero de Oro en la localidad toledana de Villaseca de la Sagra, y ya van un total de 17 ediciones consecutivas en la ya conocida como la "pamplona toledana". Y es que ya la localidad de Villaseca de la Sagra se puede considerar asentada y consolidada en el panorama nacional de la tauromaquia en España por la gran labor que realizan año tras año en un pueblo de apenas 2.000 habitantes, pero con una gran pasión por la tauromaquia y unas buenas maneras de hacer las cosas de forma correcta.
Y es que hoy en día, son pocos los privilegiados que pueden realizar la labor que hace Villaseca.
No todo el mundo puede acoger a día de hoy una feria con un total de cinco novilladas ante las mejores ganaderías del panorama taurino y teniendo como gran protagonista al toro, algo fundamental en este pueblo por su presencia y por su trapío. Las ganaderías presentes en el Alfarero de Oro 2017 han sido Torrestrella, La Quinta, El Ventorrillo, Cebada Gago y Baltasar Ibán ante los quince mejores novilleros del momento. Las últimas tres ganaderías ya repitiendo un año más en el Alfarero y contando con las novedades de ganaderías con gran nombre como son Torrestrella y La Quinta, esta última dejando un gran sabor de boca al aficionado tras su paso por el Alfarero.
En esta edición del Alfarero de Oro el triunfador ha sido el novillero venezolano Jesús Enrique Colombo tras cortar en la tercera de abono de la feria un total de tres orejas ante un encierro de la ganadería toledana de El Ventorrillo. Colombo volvió a demostrar la predisposición a la hora de entrar a matar, algo que le hizo destacar sobre los otros novilleros y poder alzarse como vencedor de la edición de este año.
La edición de este año la podemos resumir con que en ciertos tramos de las novilladas los novillos estuvieron por encima de los novilleros, además de los repetidos fallos de estos con los aceros.
La feria arrancó con una de las ganaderías a estreno en Villaseca de la Sagra, la de Torrestrella, que lidió un encierro muy por debajo de lo esperado. No fue el mejor arranque posible de la feria debido a que la ganadería estuvo muy por debajo de lo esperado, Torrestrella no pudo completar la novillada entera y El Ventorrillo tuvo que completarle metiendo a un buen jabonero que fue uno de los novillos destacados durante la feria de este año.
En la primera de abono solo pudimos destacar al cuarto novillo de la tarde de nombre "Carcelero" que fue lidiado por Pablo Aguado que entró en sustitución de el lesionado Adrien Salenc tras su cogida en la feria de Calasparra. Sin lugar a dudas un gran aninal de la ganadería toledana que dió un gran juego en la muleta del novillero sevillano.
En la segunda de abono de Villaseca de la Sagra, los nombres destacados fueron La Quinta tras la buena novillada que echó y el novillero Ángel Sánchez. Con el encierro de La Quinta llegó la primera oreja de la feria, fue cortada por el novillero Ángel Sánchez, tras una estocada de ley al primero de la tarde y cuajar anteriormente una gran faena.
Respecto a los novilleros el nombres destacado de la tarde fue el de Ángel Sánchez. El novillero madrileño supo poner corazón y cabeza ante el encierro de La Quinta donde fue cogido a la hora de entrar a matar en el primero de la tarde, pero no fue ningún problema para él.
El otro nombre destacado fue el de Jorge Isiegas, el novillero consiguió despertar a la plaza con el tercero de la tarde, tras arrancar su faena con ganas de triunfar pero sin estar acertado con la espada.
Rafa Serna que tomara próximamente la alternativa como matador de toros, se borró totalmente en la tarde, dejando pasar inadvertido un gran ejemplar de La Quinta por el pitón izquierdo.
La ganadería cordobesa también hecho otro buen novillo para cerrar la tarde, sin suerte alguna para los novileros, tras no saber leerlos a cada uno en su muleta.
Y es que el novillero venezolano volvió a demostrar una vez más en Villaseca el buen momento que atraviesa actualmente. Con mucha confianza y con las cosas claras desde el primer momento cuajó dos grandes faenas a su lote con la destacada actuación en ambos tercios de banderillas y asestando dos grandes estocadas a cada animal.
Otra cara también positiva de la tarde fue la de Diego Carretero. El novillero formado en la escuela taurina de Albacete, dejó grandes cosas positivas en la tarde e incluso estuvo apunto de cortar una oreja al primer animal de su lote. Carretero estuvo correcto con el capote y cuajó una gran faena de mucho temple con la muleta a su primero, pero acabaría pinchando con los aceros posteriormente.
Andy Younes fue el más discreto de la tarde, quizás porque le tocó lidiar con el lote más complicado. Con su primero tuvo que abreviar faena, mientras que con el segundo estuvo mejor. Le dejó llegar de largo al ejemplar de El Ventorrillo y le construyó una faena serena que podía haber acabado en oreja, sino hubiera esperado demasiado a que el animal se echara al suelo tras propiciarle la estocada.
En la cuarta del Alfarero de Oro, al igual que en la primera, tuvimos una tarde descafeinada. Si bien en la primera no hubo novillos y si novilleros, en esta paso lo mismo pero al contrario. Se lidiaron reses de buena condición de la acreditada ganadería de Cebada Gago destacando sobre todo al primero de la tarde de nombre "Culto" -premiado como mejor novillo de la feria-.
Lo más destacado de la cuarta fue el novillero sevillano Ángel Jiménez que cuajó una gran faena al primero de la tarde. Una faena que se vió emborronada con la espada donde perdió todas susopciones de triunfo. El animal debió de ser premiado con la vuelta al ruedo, pero no fue visto de ese modo por parte de la presidencia.
Pocos lúcidos estuvieron los otros novilleros, tanto el francés Tibo García como el toledano Alejandro Gardel. Quizás la peor parte de los dos se la llevaría el de Borox que fue silbado durante la faena a su segundo y tuvo que abreviar con ella.
Y cuándo parecía que Villaseca había dictaminado su fin del Alfarero de este año, ahí apareció de nuevo la ganadería de
Baltasar Ibán para poner toda la emoción posible en la quinta y última de abono. Sin lugar a dudas fue la mejor corrida presentada durante esta edición del Alfarero y así fue reconocida una vez más como la mejor ganadería.
La última de la tarde tuvo nombres propios, Baltasar Ibán y Carlos Ochoa. Ibán por el buen encierro que echó en Villaseca y Carlos Ochoa por gran tarde que ofreció en Villaseca de la Sagra, donde tel palco le privó de haber salido por la puerta grande tras la faena realizada al primero de su lote. Quizás es de lo que más se ha hablado durante el Alfarero de este año, ¿debió salir Carlos Ochoa por la puerta grande? Ochoa estuvo colosal en el tercero y primero de su lote donde se aburrió de torear con el capote y donde dejó muletazos de ensueño en su faena. Sumado a ello una grandísima estocada que hizo que el novillo rodará inmediatamente al suelo. Lamentablemente el novillero madrileño tuvo que conformarse con una oreja, en una tarde que quizás mereció más premio y debió de salir por la puerta grande de La Sagra.
En materia de sus compañeros, la cara se la llevó Alejandro Fermín y la cruz Rafael González. El de Cabezuela del Valle pasó el examen con aprobado, donde estuvo correcto con su lote mucho mejor con el segundo, pero desafortunado con la espada a la hora de matar.
Mucho que mejorar le quedó a Rafael González con la espada en esa tarde, donde estuvo francamente mal con los aceros en ambos novillos de su lote, matando con dos estocadas a destiempo y mal colocadas. Mejor estuvo con la muleta donde dejó buennos derechazos al segundo de su lote.
Se cerró así por lo tanto una nueva edición del Alfarero de Oro en Villaseca de la Sagra con un total de 4 orejas repartidas entre Ángel Sánchez y Jesús Enrique Colombo. Dondel el triunfador fue el novillero venezolano, mientras que la mejor ganadería elegida fue la de Baltasar Ibán.
El premio al mejor novillo se lo llevó Cebada Gago y la mejor faena fue para el novillero madrileño Carlos Ochoa. Mientras que en la brega y los palos, el premio se lo llevó Raúl Cervantes.
La ganadería cordobesa también hecho otro buen novillo para cerrar la tarde, sin suerte alguna para los novileros, tras no saber leerlos a cada uno en su muleta.
Tuvimos que esperar para que la feria remontara en sus tardes, y lo tuvimos que hacer hasta la tercera de abono, donde el novillero venezolano Jesús Enrique Colombo abriría la puerta grande de La Sagra y se colocaría como gran favorito para llevarse el certamen.
Se lidiaron reses de la ganadería toledana de El Ventorrillo, de notable presencia y buenas hechuras como nos tienen acostumbrados año tras año, pero quizás algo por debajo de lo esperado. Destacando al cuarto novillo de la tarde de nombre "Adinerado" que sería el ejemplar al que Colombo le cortaría las dos orejas.Y es que el novillero venezolano volvió a demostrar una vez más en Villaseca el buen momento que atraviesa actualmente. Con mucha confianza y con las cosas claras desde el primer momento cuajó dos grandes faenas a su lote con la destacada actuación en ambos tercios de banderillas y asestando dos grandes estocadas a cada animal.
Otra cara también positiva de la tarde fue la de Diego Carretero. El novillero formado en la escuela taurina de Albacete, dejó grandes cosas positivas en la tarde e incluso estuvo apunto de cortar una oreja al primer animal de su lote. Carretero estuvo correcto con el capote y cuajó una gran faena de mucho temple con la muleta a su primero, pero acabaría pinchando con los aceros posteriormente.
Andy Younes fue el más discreto de la tarde, quizás porque le tocó lidiar con el lote más complicado. Con su primero tuvo que abreviar faena, mientras que con el segundo estuvo mejor. Le dejó llegar de largo al ejemplar de El Ventorrillo y le construyó una faena serena que podía haber acabado en oreja, sino hubiera esperado demasiado a que el animal se echara al suelo tras propiciarle la estocada.
En la cuarta del Alfarero de Oro, al igual que en la primera, tuvimos una tarde descafeinada. Si bien en la primera no hubo novillos y si novilleros, en esta paso lo mismo pero al contrario. Se lidiaron reses de buena condición de la acreditada ganadería de Cebada Gago destacando sobre todo al primero de la tarde de nombre "Culto" -premiado como mejor novillo de la feria-.
Lo más destacado de la cuarta fue el novillero sevillano Ángel Jiménez que cuajó una gran faena al primero de la tarde. Una faena que se vió emborronada con la espada donde perdió todas susopciones de triunfo. El animal debió de ser premiado con la vuelta al ruedo, pero no fue visto de ese modo por parte de la presidencia.
Pocos lúcidos estuvieron los otros novilleros, tanto el francés Tibo García como el toledano Alejandro Gardel. Quizás la peor parte de los dos se la llevaría el de Borox que fue silbado durante la faena a su segundo y tuvo que abreviar con ella.
Baltasar Ibán para poner toda la emoción posible en la quinta y última de abono. Sin lugar a dudas fue la mejor corrida presentada durante esta edición del Alfarero y así fue reconocida una vez más como la mejor ganadería.
La última de la tarde tuvo nombres propios, Baltasar Ibán y Carlos Ochoa. Ibán por el buen encierro que echó en Villaseca y Carlos Ochoa por gran tarde que ofreció en Villaseca de la Sagra, donde tel palco le privó de haber salido por la puerta grande tras la faena realizada al primero de su lote. Quizás es de lo que más se ha hablado durante el Alfarero de este año, ¿debió salir Carlos Ochoa por la puerta grande? Ochoa estuvo colosal en el tercero y primero de su lote donde se aburrió de torear con el capote y donde dejó muletazos de ensueño en su faena. Sumado a ello una grandísima estocada que hizo que el novillo rodará inmediatamente al suelo. Lamentablemente el novillero madrileño tuvo que conformarse con una oreja, en una tarde que quizás mereció más premio y debió de salir por la puerta grande de La Sagra.
En materia de sus compañeros, la cara se la llevó Alejandro Fermín y la cruz Rafael González. El de Cabezuela del Valle pasó el examen con aprobado, donde estuvo correcto con su lote mucho mejor con el segundo, pero desafortunado con la espada a la hora de matar.
Mucho que mejorar le quedó a Rafael González con la espada en esa tarde, donde estuvo francamente mal con los aceros en ambos novillos de su lote, matando con dos estocadas a destiempo y mal colocadas. Mejor estuvo con la muleta donde dejó buennos derechazos al segundo de su lote.
Se cerró así por lo tanto una nueva edición del Alfarero de Oro en Villaseca de la Sagra con un total de 4 orejas repartidas entre Ángel Sánchez y Jesús Enrique Colombo. Dondel el triunfador fue el novillero venezolano, mientras que la mejor ganadería elegida fue la de Baltasar Ibán.
El premio al mejor novillo se lo llevó Cebada Gago y la mejor faena fue para el novillero madrileño Carlos Ochoa. Mientras que en la brega y los palos, el premio se lo llevó Raúl Cervantes.
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